La segunda jornada de huelga nacional convocada por los médicos ha vuelto a dejar un impacto muy reducido en Torredelcampo. Según datos del Sindicato Médico Andaluz (SMA) en Jaén, la participación se ha mantenido en niveles prácticamente idénticos a los de la primera jornada: entre los facultativos titulares y los médicos residentes que no estaban de permiso, de salida de guardia o asignados a servicios mínimos, solo un médico ha secundado el paro, lo que supone un seguimiento inferior al 10% del personal del Centro de Salud.
La actividad asistencial se ha desarrollado con normalidad, ya que el porcentaje de profesionales adheridos a la huelga es meramente testimonial.
¿Qué significa estar en huelga? El derecho y sus implicaciones
El derecho a la huelga está recogido en el artículo 28.2 de la Constitución Española y se considera un derecho fundamental. Un trabajador se encuentra realmente en huelga cuando interrumpe voluntariamente su actividad laboral durante su jornada ordinaria como forma de protesta colectiva.
No se consideran en huelga:
- Los profesionales de permiso o vacaciones,
- Los salientes de guardia, que no están en jornada ordinaria,
- Los incluidos en servicios mínimos, ya que deben garantizar la atención esencial,
- Ni aquellos adscritos a tareas no paralizables.
Además, la participación en la huelga implica la pérdida del salario correspondiente al tiempo no trabajado, y la administración no puede sustituir al profesional huelguista más allá de los servicios mínimos establecidos.
El SMA aclara que, teniendo en cuenta estos criterios, el número de facultativos de Torredelcampo en condiciones reales de ejercer el derecho a la huelga es reducido, y solo uno de ellos ha decidido sumarse, lo que explica el porcentaje tan bajo.
Motivos de la protesta médica
Aunque la incidencia local es mínima, las reivindicaciones que sustentan la convocatoria siguen siendo las mismas. A nivel nacional, los médicos denuncian jornadas laborales excesivas, que pueden alcanzar 60 o 70 horas semanales, y guardias de 24 horas que no se remuneran como horas extra.
Los facultativos argumentan que esta sobrecarga no solo perjudica al profesional, sino también a los pacientes, que ven reducida la calidad asistencial debido al cansancio acumulado, la falta de tiempo por consulta y la saturación del sistema.
Por ello, reclaman:
- Un estatuto propio para su profesión,
- Una reclasificación al grupo A1+, acorde a su formación de 360 créditos,
- Y un marco de negociación específico.
Mientras avanzan las jornadas de paro, Torredelcampo se mantiene como uno de los municipios con menor seguimiento de la provincia.